Convocan una manifestación contra Cuna del Alma
La plataforma Salvar el Puertito de Adeje ha organizado una nueva manifestación para protestar contra el macroproyecto turístico Cuna del Alma. La movilización se llevará a cabo el próximo sábado 10 de agosto a las 11:00 horas en la playa del Puertito, situada en el sur de Tenerife. Los activistas han denunciado que la promotora ha puesto una valla de metal alrededor del terreno donde se prevé la construcción de 3.602 plazas turísticas, incluyendo villas de lujo y alojamientos hoteleros y extrahoteleros. "Las obras pueden comenzar en cualquier momento", advierten los miembros de la plataforma.
Los activistas acusan a las autoridades canarias de favorecer el proyecto, al que consideran una amenaza para el medio ambiente, la historia y el futuro de la zona. "No permitiremos que destruyan lo poco que nos queda. Vamos a luchar por el Puertito que queremos, cueste lo que cueste", enfatiza la plataforma.
Salvar el Puertito de Adeje propone una solución radical para detener definitivamente el proyecto: la compra de los terrenos por parte de las administraciones públicas. Según un estudio de la asociación ecologista, la adquisición del solar de 430.000 metros cuadrados costaría entre 14 y 18 millones de euros. Esta medida permitiría ampliar el espacio natural protegido del Sitio de Interés Científico de La Caleta y restaurar el área dañada por las obras preliminares.
Hasta el momento, tanto el Ayuntamiento de Adeje como el Gobierno de Canarias han mostrado su apoyo al proyecto Cuna del Alma. El alcalde José Miguel Rodríguez Fraga, quien lidera la corporación municipal desde hace casi cuatro décadas, autorizó recientemente la traslocación de la viborina triste, una planta protegida. El anterior Gobierno de Canarias, compuesto por el PSOE, Nueva Canarias, Podemos y ASG, había paralizado las obras hace un año y medio debido a la presencia de esta especie. La resolución del Ejecutivo autonómico estipulaba que la reubicación de la planta solo podría realizarse por razones de interés público.
La autorización para mover la viborina triste era el último requisito que necesitaba la empresa constructora para continuar con las obras, después de que los tres expedientes abiertos contra el proyecto por falta de estudio de impacto ambiental, destrucción del patrimonio arqueológico y amenazas a la flora protegida fueran archivados o caducados.
En abril, un grupo de activistas de la plataforma Canarias se agota llevó a cabo una huelga de hambre en protesta contra el proyecto Cuna del Alma, el hotel de La Tejita y el "modelo de crecimiento suicida". Ese mismo mes, manifestaciones en todas las islas exigieron un límite a la masificación turística y la sobreexplotación del territorio del Archipiélago.