
El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, presentó este lunes las nuevas medidas que regulan el acceso al Espacio Natural del Roque Nublo «ofrecer más seguridad al visitante y garantizar la protección del medio ambien Estas normas, que ya han entrado en vigor, buscan mejorar las condiciones de acceso tanto para los residentes como para los turistas que visitan este emblemático enclave natural.
Durante una visita al Roque Nublo, Morales detalló que las nuevas acciones se centran en tres aspectos clave. En primer lugar, se ha implementado un sistema de reservas a través de la plataforma grancanariasenderos.com, que asigna un código QR a cada persona que solicita acceso. Este sistema permite programar las visitas entre las 09:00 y las 17:00 horas, el horario de mayor afluencia, mientras que el acceso fuera de este tramo horario permanece libre.
En segundo lugar, se ha eliminado el aparcamiento que existía en las inmediaciones del Roque Nublo y se han habilitado dos nuevas zonas de estacionamiento: una en la Cruz de Los Llanos y otra en el casco de Tejeda. Desde estos puntos, los visitantes podrán utilizar un servicio de guaguas circulares operado por Global, que conectará continuamente ambos lugares con el Roque Nublo. Además, se ha establecido una línea adicional que llegará desde el Faro de Maspalomas.
Morales destacó el esfuerzo coordinado de las áreas del Cabildo involucradas en este proceso, como la Consejería de Medio Ambiente, Obras Públicas y Transportes. «Hemos trabajado de manera transversal para asegurar que estas medidas cumplan con los objetivos de garantizar visitas más seguras y una mayor protección del medio ambiente», afirmó.
El presidente también subrayó que estas acciones forman parte de una estrategia más amplia que incluye intervenciones en otros espacios naturales sensibles de la isla, como Bandama y las dunas de Maspalomas. «No descartamos seguir actuando en otros lugares que puedan estar siendo afectados por un uso masivo», añadió.
Por último, Morales anunció que se realizará un seguimiento continuo de las nuevas medidas para evaluar su efectividad. «A partir de la experiencia que obtengamos, analizaremos los resultados y, si es necesario, actualizaremos las normas para adaptarnos a la realidad y asegurar que cumplimos con los objetivos planteados», concluyó.