El denunciante se ratifica y añade que fue secuestrado
Tenerife
08 ene. 2015

Un testigo del Caso Corredor acusa a la Policía de falsificar su firma

Pocas sorpresas se esperaban hoy en las primeras declaraciones por la Operación Corredor, en la que está imputado el alcalde de La Laguna y candidato de Coalición Canaria (CC) a las elecciones autonómicas de 2015, Fernando Clavijo. Nada más lejos de la realidad. Los testimonios de los dos primeros testigos, el denunciante, el empresario Carlos David Calderón, y su pareja en el momento de los hechos inicialmente investigados, el periodista Isaac Tacoronte, enredaron aún más la compleja investigación que lleva el juez César Romero Pamparacuatro.

En medio de la polémica levantada a raíz de los errores procesales detectados en la instrucción, como la falta de un auto para autorizar una de las prórrogas de las escuchas telefónicas, Isaac Tacoronte aseguró hoy ante el juez y la fiscal Anticorrupción, María Farnés, que dos inspectores de la Brigada  Provincial de la Policía Judicial falsificaron su firma en el acta de la segunda declaración que se le tomó durante las diligencias previas, según las fuentes presenciales consultadas por mirametv.com. El periodista solo reconoció uno de los dos testimonios que constan en el sumario del caso, en los que incurrió en "constantes contradicciones", como relataron en su momento los investigadores.  

Hay que recordar que, según consta en el Oficio de la Policía Judicial de 25 de febrero de 2010, Tacoronte prestó declaración ante dos inspectores del Grupo de Delitos Económicos los días 22 y 23 de ese mismo mes. Ambas actas se encuentran físicamente en el sumario. Mientras que en la primera cita "intentó mantenerse al margen", pese a que participó activamente en la reunión para abordar un supuesto trato de favor a determinados locales de ocio nocturno, que su expareja grabó e incorporó en la denuncia inicial; en la segunda reconoció su voz en la cinta pero acusó a Carlos Calderon de haberla manipulado, lo que los instructores relacionaron en su informe con un posible "ánimo por parte del mismo de ocultar más de lo que en realidad conoce".

¿Y qué es lo que sabía y negó el periodista? Pues según el oficio policial, era conocedor de todo: "de las reuniones con Fernando Clavijo, del acuerdo tácito para cerrar el local más tarde de lo que la licencia les permitía, de la promesa de Fernando Clavijo sobre el archivo de los expedientes, diciendo que los policías no se ratificarían y diciéndoles lo que debían alegar". Hoy, aunque sólo reconoció la primera de sus declaraciones, volvió a desmentir las acusaciones de su anterior compañero sentimental, de quien se llegó a sentir presionado. Preguntado a qué se refería cuando dijo que la grabación había sido manipulada afirmó que "estaba bloqueado" y que se refería al orden de las conversaciones.   

 

Nuevas diligencias

El juez procedió, tras escuchar su declaración, a tomar la firma de Tacoronte para iniciar una investigación ante los nuevos hechos conocidos, después incluso de recordarle que estaba acusando con sus palabras de un delito a los inspectores de la Policía. Ahora Pamparacuatro decidirá, a través de las diligencias que estime oportunas, si imputa a los miembros de la Brigada Judicial o, por el contrario, al propio periodista por falso testimonio y calumnias. El artículo 458 del Código Penal establece que "el testigo que faltare a la verdad en su testimonio en causa judicial será castigado con las penas de prisión de seis meses a dos años y multa de tres a seis meses". 

Llama la atención que Isaac Tacoronte fue contratado en 2011, un año después de presentarse la denuncia y de declarar ante la Policía Judicial, como responsable de comunicación de la campaña electoral de José Manuel Bermúdez, compañero de partido de Fernando Clavijo, y candidato entonces al Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife. Tras los comicios, y al obtener el político de CC la Alcaldía, fue incorporado al Gabinete de Prensa del Consistorio capitalino, donde aún continúa.

Mucho más larga fue la declaración del denunciante del caso, que estuvo cerca de tres horas y media dentro del Juzgado de Instrucción Número 1 de La Laguna. Carlos Calderón ratificó uno por uno los hechos que denunció en su día, vinculados con las presuntas extorsiones que sufrió por parte de un agente de la Policía Local para no ser sancionado por incumplir el horario de cierre del pub Sketch, del que era administrador único y en el que también trabajó Isaac Tacoronte. El empresario de la noche contó, según las fuentes consultadas, el calvario que dice haber sufrido antes y después de poner los hechos en conocimiento del Poder Judicial. Pero hoy fue más allá, y a las supuestas coacciones que padeció y que en su momento denunció añadió una nueva: un secuestro por parte de dos personas, a las cuales identificó durante su testimonio. Esta nueva acusación obliga ahora al juez a abrir nuevas diligencias para investigar los hechos.

Los siguientes en pasar por sede judicial serán los principales imputados. Mañana será el turno para las declaraciones de Fernando Clavijo y la concejala de CC Blanca Pérez. El lunes 12 de enero prestarán testimonio la edil del PSOE María José Castañeda y el asesor de Alcaldía Ricardo González, representante vecinal de Las Chumberas. El martes cerrará esta primera ronda el considerado cabecilla de la trama que presuntamente estafó más de cuatro millones de euros a la Seguridad Social, el empresario y abogado Evaristo González Reyes.