
Agentes de la Policía Nacional han desmantelado en el municipio tinerfeño de La Laguna una presunta trama de robo y reventa de teléfonos móviles de alta gama que ha dejado, por el momento, un balance de cinco personas detenidas y 13 dispositivos recuperados, valorados en 13.000 euros.
La investigación comenzó a principios de año, cuando una empresa de comunicación y logística denunció ante las autoridades la desaparición reiterada de terminales que no llegaban a sus clientes. Según la denuncia, los teléfonos eran sustraídos antes de su distribución, pese a haber sido registrados y recepcionados correctamente, lo que despertó las sospechas sobre posibles implicaciones internas. El valor total de los efectos sustraídos se estima en 38.000 euros.
Tras meses de pesquisas, los agentes lograron localizar algunos de los terminales en establecimientos ubicados en el sur de Tenerife, especializados en la venta de tecnología a bajo precio. Estas tiendas, cuyo principal público son turistas extranjeros, ofrecían los dispositivos a precios muy por debajo del mercado, lo que favorecía la compra masiva para su posterior traslado a países de origen.
La complejidad de la operación radicó en la cantidad de intermediarios implicados, ya que los móviles robados pasaban por varias manos antes de llegar a los puntos de venta. Parte de los dispositivos fueron detectados también en Gran Canaria y otros en diversos países europeos, por lo que fue necesaria la colaboración de otras unidades policiales fuera de la isla.
El principal sospechoso es un repartidor de la propia empresa denunciante, que presuntamente aprovechaba su acceso a las instalaciones para sustraer los terminales. Además, entre los arrestados figuran los propietarios de dos de las tiendas en el sur de la isla donde se vendían los teléfonos. Las investigaciones siguen abiertas para determinar si hay más implicados.