Solidaridad con Yurena
Hace unos meses que conocimos a Yurena, su madre Crusi vino al "Programa de Manuel Artiles" para contarnos la historia de su hija pequeña. Yurena era una niña muy activa hasta el punto que cuando su enfermedad empezó a florecer su familia pensó que “era una trastada de la niña, me decía que no escuchaba bien y pensábamos que eran cosas de ella para librarse del colegio” Por desgracia Yurena decía la verdad, había perdido un 90% de audición y tras el primer diagnóstico con 9 años su enfermedad ha ido avanzado, ahora no tiene intestino grueso, tolera muy poco la comida, por lo que tiene serios problemas de nutrición y casi no puede caminar.
Acaba de cumplir 15 años y aunque su enfermedad le limita mucho su familia intenta que su vida diaria sea lo más parecida al de una chica de su edad. Cuando su madre vino a nuestro plató nos contó que lo que Yurena deseaba era un ordenador, un ordenador portátil para poder estimular sus manos que con el tiempo se han ido engarrotando.
La ayuda de los empresarios
Desde que conocimos este caso Manuel Artiles y todo el equipo se puso manos a la obra para conseguir el ordenador portátil que tanto esperaba Yurena y el regalo llegó de la mano de Worten y su propietario en Canarias, Amid Achid.
La alegría de las pequeñas cosas
Un equipo de Mírame Canarias se trasladó hasta el municipio de El Sauzal en Tenerife donde vive Yurena y su familia para entregarle su regalo. Nadie de la familia sabía que íbamos a ir por lo que las caras de sorpresa estaban garantizadas.
“No pensé que ordenador llegaría, Manolo nos lo había prometido pero pensé que no lo iba a tener, nosotros no podemos costearlo y ha sido una enorme sorpresa” nos decía Crusi emocionada. “Doy las gracias a Manolo, a Worten y a todos los que han hecho posible que Yurena tengo su ordenador portátil, es muy importante para que la situación de sus manos no empeore”
Para otra persona un ordenador apenas tiene significado, una herramienta de trabajo, un sistema para navegar por internet o leer, pero para Yurena y su familia significa mucho más. Es la forma que tienen de alegrar los días a su niña, de conseguir que el poco o mucho tiempo de vida que tiene esté repleto de las cosas que ella desea, de momentos, de sonrisas, minutos de diversión que colmen de felicidad los días de Yurena.