Prisión para el patrón de una patera que llegó a Fuerteventura en 2012
La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha ratificado, en una sentencia dictada el pasado 17 de noviembre, a la que ha tenido acceso mirametv.com, una condena de once años de prisión contra el patrón de una patera que arribó a la costa de Fuerteventura en octubre de 2012 procedente de Marruecos. La embarcación fue utilizada para trasnsportar a 13 personas y un total de 19 kilos de hachís.
La sentencia desestima el recurso de casación interpuesto por el responsable de la embarcación contra el fallo de la Audiencia Provincial de Las Palmas de Gran Canaria, que en febrero condenó al patrón de la patera a once años de cárcel, siete por atentar contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y cuatro por otro delito contra la salud pública, por el que además tendrá que hacer frente a una multa de 90.000 euros. Los magistrados también fijaron penas de cuatro años de cárcel para dos mujeres que colaboraron con el principal acusado y tres años para una cuarta persona que ayudó a trasportar la droga y que también viajaba en la embarcación.
Con la decisión del Tribunal Supremo se pone punto final a una investigación que se inició en 2011 cuando la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Policía Nacional de Las Palmas de Gran Canaria recibió información sobre la posible participación del finalmente condenado en una red que favorecía la llegada de migrantes a las costas de Gran Canaria procedentes de Marruecos.
Aunque inicialmente se vinculó al sospechoso, que ya había estado internado en el CIE de Barranco Seco (foto) y había sido expulsado de España hasta en cuatro ocasiones, con la llegada de una embarcación a Gran Canaria en septiembre de 2011, finalmente solo fue condenado por actuar como patrón de la patera que más de un año después arribó al litoral de El Cotillo, en el municipio majorero de La Oliva.
Durante la instrucción, que llevó el Juzgado Número 1 de Las Palmas de Gran Canaria, se decretaron las intervenciones telefónicas de los dispositivos de tres de los condenados y se tomó declaración a varios testigos. De los pinchazos se obtuvieron una parte importante de las pruebas que sirvieron para sentar en el banquillo a los acusados.
Perdió el rumbo
El relato de los hechos probados parte del día 22 de octubre de 2012, cuando una patera salió desde Safi (Marruecos) con 14 personas a bordo, "que habían pagado las cantidades exigidas al efecto", rumbo a la costa norte de Gran Canaria. Durante la travesía, el patrón perdió el rumbo de la embarcación, que finalmente arribó a Fuerteventura el 28 de octubre.
Las dos mujeres condenadas colaboraron con el considerado cabecilla de la red "proporcionando la infraestructura necesaria" para que cuando la patera llegase a Gran Canaria los migrantes "fueran trasladados en un vehículo" y el patrón de la embarcación "dispusiese de alojamiento". Entre las personas que viajaban en la patera se encontraban cuatro jóvenes del entorno familiar de las condenadas.
Cuando la patera llegó a la costa de El Cotillo, todos los migrantes se quedaron en la barca, menos el patrón y su socio, que abandonaron la zona con el hachís que habían transportado desde Marruecos: 19 kilos y 323 gramos, con una pureza del 1% en THC. Los investigadores calcularon en 29.710 euros el precio de mercado de la droga.
Entre las diferentes declaraciones testificales de personas que viajaban en la patera destaca la de un migrante que reconoció al condenado como el patrón de la embarcación, del que dijo que "tomaba cocaína y llevaba un palo y un cuchillo para que la gente no se levantara de la patera y si alguien se levantaba le daba con el palo".
El Tribunal Supremo desestima ahora todos los argumentos en los que el condenado basó su recurso de casación, una supuesta vulneración del derecho de la presunción de inocencia y la falta de motivación de la sentencia de la Audiencia Provincial.