El Ayuntamiento de Antigua acogía este jueves por la noche la reunión de medio
centenar de pilotos y copilotos, que con el fin de impulsar el automovilismo en
Fuerteventura, se reunían con el presidente de la Federación del Automovilismo en Las
Palmas, Miguel Ángel Toledo.
La reunión organizada por el presidente de la escudería Maxo Sport, Miguel Ángel
Guerra, estuvo presidida por el alcalde de Antigua, Matías Peña, que acompañado del
concejal de Deportes, Fernando Estupiñán, mostró su disposición de apoyo y
colaboración para fomentar este deporte en la isla.
La concejalía de Deportes del Ayuntamiento de Antigua tiene todo preparado para la
celebración del próximo Rallye de Antigua, a la espera de recibir los informes que
permitan la realización de la prueba, señalaba el concejal Estupiñán que añadía, incluso
hemos habilitado una partida económica para cubrir cualquier imprevisto que surgiera
en la organización del Rallye de Antigua.
El presidente de la Federación de Automovilismo mostró su preocupación ante la
abultada burocracia que exige la organización de un Rallye, afirmando el también
piloto, debemos cerrar convenios de colaboración con el Cabildo de Fuerteventura y
ayuntamientos que faciliten la tramitación de informes y garanticen un calendario anual
de pruebas, slaloms y rallyes en la isla.
He tenido la ocasión de visitar el circuito de Antigua en Los Alares, y hay que felicitar
al Ayuntamiento de Antigua por ser uno de los mejores circuitos del archipiélago, y
añadía Miguel Ángel Toledo, les anuncio mi compromiso de homologarlo lo antes
posible, como circuito de autocross, desde la Federación del Automovilismo en Las
Palmas.
Por su parte, Miguel Ángel Guerra, agradecía la magnífica asistencia a la reunión con
más de 50 pilotos, copilotos y representantes de equipos y escuderías de la isla. Esta
asistencia, afirma el presidente de Maxo Sport, demuestra la unión que todos tenemos
por defender el automovilismo en Fuerteventura, y que la organización de sus rallyes
deje de ser una travesía en el desierto, ante un abuso de informes y expedientes,
esfuerzo que en ocasiones recibe una respuesta negativa justo antes de dar comienzo a la
carrera, con los gastos económicos que esa decisión supone tanto para organizadores
como para los equipos participantes.