El Ayuntamiento de Candelaria emitía el pasado jueves, 17 de mayo, el decreto por medio del cual se ordenaba el realojo de los vecinos de las viviendas situadas en el talud de Bajo La Cuesta, entre los números 1 y 31, ambos inclusive, que tuvo lugar en la mañana de este lunes 28 de mayo a las 9.00 horas. Los vecinos que ya han podido acceder a sus propiedades son 21, que llevaban 19 meses sin estar en el barrio a pesar de que el desalojo estaba previsto por 3 meses.
Para muchos el regreso tuvo sabor amargo por dos cuestiones: dejaban atrás a muchos otros vecinos que todavía no podrán acceder a las casas de la segunda parte del talud (unas 80 personas), y porque se encontraron con que habían ocupado viviendas y se habían producido robos. Fue el pasado sábado cuando la Guardia Civil detenía a una pareja de okupas tras el aviso de unos vecinos que vieron a dos individuos dentro del barrio; los vecinos lamentan que el Ayuntamiento retirara desde el día 20 la seguridad privada en la entrada al núcleo y el Ayuntamiento sostiene que, una vez finalizado el contrato con la empresa de Seguridad Privada en Bajo La Cuesta, el pasado 21 de mayo, se ordenó a la Policía Local que reforzara la seguridad en la zona.
La actuación de la Guardia Civil.
Sobre los robos, la Guardia Civil ha informado que agentes pertenecientes al Puesto Principal de Candelaria, han procedido a la detención de un varón de 37 años de edad, vecino de Tegueste, y una mujer de 25 años, vecina de Santa Cruz de Tenerife, como presuntos autores de seis delitos de robo con fuerza en las casas, en grado de tentativa.
Tras ser avisados por los vecinos, los agentes se personaron en el lugar, detectaron cinco de las viviendas del citado barrio forzadas y en estado de desorden en su interior. Cuando los agentes se encontraban inspeccionando el lugar, localizaron en un sexto inmueble a los ahora detenidos intentando sustraer objetos de su interior, que al percatarse de su presencia, intentaron huir, siendo ambos detenidos de forma inmediata, ya que aunque el varón intentó esconderse debajo de la cama de otra de las viviendas, fue rápidamente localizado.
Posteriormente, los agentes observaron que los ahora detenidos ya tenían preparados en cada vivienda los enseres que iban a sustraer, los cuales se encontraban guardados en bolsas dispuestas para su sustracción.
Además, se da la circunstancia de que al varón detenido le constaba una orden de alejamiento en vigor, que le prohibía aproximarse a la otra acusada también detenida.
Ambos detenidos están acusados de seis delitos de robo con fuerza en las cosas en grado de tentativa, y además al varón se le acusa también de un delito de quebrantamiento de condena. Los detenidos, junto con las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Güímar.
A pesar de la caída de una piedra recientemente, el realojo pudo realizarse.
También se da la circunstancia de que el pasado viernes 18 de mayo se produjo la caída de una piedra en la zona de acceso a Bajo La Cuesta, por lo que el Ayuntamiento solicitó de forma urgente nuevos informes al arquitecto técnico municipal, al ingeniero director de las obras y a la Policía Local, quienes concluyeron que era favorable seguir adelante con el realojo.
Cabe recordar que el desalojo de octubre de 2016 y que afectó a todos los vecinos del barrio, fue una medida cautelar y provisional por motivos de grave riesgo de desprendimiento de rocas sobre las viviendas, según constaba en los informes técnicos. El realojo ha sido posible porque se ha certificado que las actuaciones efectuadas en el talud propiedad de la empresa Unelco-Endesa aportan un nivel de seguridad sobre las viviendas superior al existente antes del inicio de las obras.
Según el Ayuntamiento, en las últimas semanas se han recabado los respectivos informes sobre la dirección actual de las 11 familias de Bajo La Cuesta que resultaron beneficiarias de las ayudas económicas de emergencia, resultando que 7 de ellas ya han sido realojadas, y por lo tanto dejaran de percibir la ayuda, que sí seguirán disfrutando quienes tengan su primera vivienda en Bajo La Cuesta y todavía no hayan podido volver a sus casas.
