El ocaso del CCN y la desaparición de Ignacio González
Ignacio González ha desaparecido. Al menos eso es lo que comentan, uno tras otro, varios militantes, simpatizantes, ex militantes y hasta miembros del comité federal del CCN con los que hemos podido realizar un carrusel de llamadas que dan por más que contrastada la noticia. Tras los catastróficos resultados electorales del pasado 24 de mayo que, por un lado, dejaban al CCN como la 
onceava fuerza política en Santa Cruz de Tenerife con 1597 votos, y que no lograba obtener representación ni en el Parlamento ni en Cabildos a través de su alianza con Unidos, los acontecimientos se han precipitado.
La noche del 24M Ignacio González vivió la primera parte de la debacle encerrado en su despacho de la sede santacrucera del partido acompañado por parte del comité federal. Cuando avanzó la noche, y todos fueron conscientes del desastre, llegó la primera acción que indignó a los militantes: Ignacio González abandona la sede sin dirigirse a los presentes, sin apenas despedirse. Tal es así que su segunda de a bordo, Hortensia Navarro, y el secretario federal, Alfonso López, deben asumir la responsabilidad de dar la cara ante los que allí se congregaban tras “la huída” de su líder. Los presentes no eran muchos ya que, tal eran los resultados, que se comunicó a los apoderados que aún estaban en los colegios electorales que ya no era necesario acudir a la sede con las actas.
Pocos días después, el 1 de junio, Alfonso López anuncia su dimisión y la del propio Ignacio González ante los malos resultados electorales. Segundo episodio al que asisten los miembros del CCN sin dar crédito. Ignacio González no da la cara para presentar su dimisión y lo hace a través del que era secretario federal, Alfonso López. Pese a su dimisión, López asume la responsabilidad de capitanear la nave durante las semanas de negociaciones que quedan por delante en los pocos ayuntamientos donde han logrado representación (sólo 7 concejales en toda la provincia. 3 en Arico, 3 en San Miguel de Abona y 1 en Fasnia).
Aunque fuera de 
su actividad política, en la semana siguiente a los comicios se produce un tercer capítulo en el culebrón de la desaparición de Ignacio González que deja perplejos a sus compañeros. Sin previo aviso cierra su importante negocio de restauración en La Laguna, Viña Norte, dejando en la calle a siete trabajadores que aún están en el proceso de dejar definitivamente solucionada su situación.
¿Qué ha hecho romper el silencio de la militancia?
Pero el episodio que ha hecho saltar las alarmas y que ha incendiado las relaciones entre ex compañeros de partido ha sido la presión que están recibiendo por parte de hasta una veintena de personas tras la desaparición “real y efectiva” del que fuera presidente del CCN. Se trata de aproximadamente veinte personas a las que se les ofreció desarrollar la conocida labor de ‘ensobrar’ durante la campaña electoral a cambio de una compensación económica. Según nos aseguran fuentes internas del CCN, las elegidas para esta labor eran personas con una situación económica ‘delicada’. Casi un mes después de hacer ese trabajo, por el que percibirían esa contraprestación económica sin reconocimiento legal, y viendo que es imposible contactar con Ignacio González por ninguna vía, estarían dirigiendo su presión hacia los pocos rostros del partido que aún no han salido en desbandada para cobrar lo que les prometieron.
Tal es la situación que algunos miembros del partido ya han hecho público su monumental cabreo y anuncio de retirada del CCN ante los acontecimientos. La conocida cantante Tere Melián, que iba en la lista del CCN al ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, ha publicado una carta en su muro de Facebook en la que se dirige a Ignacio González mostrando que, sobre todo, “se siente defraudada por no dar la cara, más que por los resultados electorales”. Melián, que en la misiva se desvincula totalmente del CCN, asegura que en los días posteriores a la debacle llegó a dar la cara por González ante las burlas recibidas por sus resultados. Aún así , en las letras que le dirige, le invita a la reflexión y a que “subsane el error de su desaparición”.
En declaraciones a este medio, Alfonso López, ex secretario federal del CCN, no ha querido hacer declaraciones respecto a la sucesión de acontecimientos que aquí se relata. Sin embargo, sí ha insistido en que ahora debe ser la militancia del partido la que decida el rumbo a tomar, aunque “para mi todos los indicadores apuntan a que el partido se tiene que disolver, el proyecto y la marca están agotados”.