La consejera de Bienestar Social, Igualdad, Juventud, Infancia y Familias del Gobierno, Candelaria Delgado, responde a las críticas del anterior presidente del Gobierno de Canarias y ahora ministro, Ángel Víctor Torres, el pasado 17 de enero en El programa de Manuel Artiles. Torres acusaba al equipo actual de reducir las ayudas: «De casi 10.000 familias que han tenido derecho a la prestación de la dependencia en el año 2022 a la mitad en el año 2024». «No es así», asegura Delgado, «nosotros hemos incrementado, según el Ministerio de Derechos sociales, en un 35,3% el numero de prestaciones por dependencia en el próximo año».
La consejera desmintió las palabras del ministro, y aclaró: «Una cosa es que hayamos hecho más o menos resoluciones de grado (de dependencia) y PIA (Programas Individuales de Atenciones), que podemos haber bajado un poquito, y de otra son las prestaciones». Explica que a un ciudadano de nada le sirve tener su resolución del grado de dependencia si no les llega el servicio a domicilio, la plaza en una residencia o la ayuda económica.
FONDOS PARA MIGRACIÓN
Candelaria Delgado reclama al Gobierno de España los recursos para poder hacer frente a la situación actual: «Tenemos que tener una financiación estable y unos medios adecuados para esto». Y continuaba diciendo que no sabe el motivo de por qué no llega el dinero a Canarias no. La Comisión Europa tiene «una partida presupuestaria con el nombre de Canarias para la instalación de centros de acogida para menores migrantes de entorno a 14 millones de euros, y depende del gobierno central solicitarla, y no la han pedido», denuncia la consejera.
Reflexionó Delgado, hablando de cómo su familia también emigró en los años 70, sobre la importancia también de la mano de obra en nuestras Islas. «Por qué no los traemos por vía segura, con su contrato de trabajo, se termina su contrato de trabajo y pueden volver a sus países; por qué no los formamos», demandaba Candelaria Delgado. La plena integración de los niños, niñas y jóvenes que llegan a nuestra tierra «es por lo que lucho cada día», confesaba la consejera, acordándose de las vivencias de su familia en Reino Unido.