informe sobre los bulos de inmigración
Canarias
03 jul. 2024

Aumenta de la desinformación sobre inmigrantes en España provocando discursos de odio y racismo

En los últimos años, ha aumentado la desinformación sobre los extranjeros que residen en España, incluyendo afirmaciones sin fundamento que sugieren que monopolizan la sanidad pública o reciben más ayudas sociales que los nacionales.

El Foro para la Integración Social de los Inmigrantes, compuesto por instituciones públicas, asociaciones de migrantes y entidades sociales, ha recopilado y desmentido estos "bulos" en su último informe. La publicación insta a combatir este tipo de desinformación utilizando "datos verificados de fuentes oficiales" y contextualizando adecuadamente las afirmaciones para desmentir su veracidad.

La secretaria de Estado de Migraciones, Pilar Cancela, ha subrayado la necesidad de reflexionar sobre la diferente respuesta que algunos sectores de la población española tienen hacia los migrantes en función de su origen o color de piel. 

La realidad de la población migrante en España

Uno de los mitos más comunes desmentidos en el informe es la exageración del porcentaje de población extranjera en España, que algunos sitúan por encima del 25%. Sin embargo, según la última Estadística continua de población del Instituto Nacional de Estadística, a 1 de enero de 2024, solo el 13,3% de la población en España tenía nacionalidad extranjera.

El informe también resalta cómo el término "inmigrante" varía en el imaginario social, a menudo excluyendo a ciudadanos del Reino Unido, aunque son de terceros países, mientras que incluye a los rumanos, ciudadanos de la Unión Europea con derecho a la libre circulación.

Bulos sobre la sanidad y ayudas sociales

Otro argumento común es que los inmigrantes colapsan la sanidad pública. El informe cita la Encuesta Nacional de Salud de 2017, que muestra que solo el 11% de las 16 millones de consultas médicas en el Sistema Nacional de Salud fueron de personas nacidas en el extranjero, sin que esto necesariamente implique que todas tengan nacionalidad extranjera. Además, según datos del INE de 2022, el porcentaje de inmigrantes en edad laboral (16-64 años) es mucho mayor (78%) que el de la población española (63%).

En cuanto a las ayudas sociales, el informe refuta la idea de que los inmigrantes reciben más ventajas. Según el informe de rentas mínimas de inserción 2021-2023, solo el 26,1% de los 305,340 titulares de estas ayudas eran extranjeros, y estas prestaciones requieren, entre otros requisitos, que los inmigrantes tengan residencia regular, salvo en el País Vasco. El informe señala que si los migrantes solo quisieran vivir de ayudas, el País Vasco debería ser una de las regiones que más atrajera a esta población, pero en realidad, es una de las que tiene menor porcentaje de extranjeros.

Inserción laboral y contribución económica

Contrariamente a la creencia de que los inmigrantes quitan trabajo a los nacionales, el informe revela que la inserción laboral de los migrantes es complementaria y se concentra en ocupaciones menos remuneradas. Por ejemplo, en ocupaciones elementales como el trabajo doméstico o la construcción, el 9% de los trabajadores son españoles, mientras que el 26,1% son extranjeros y el 22% tienen doble nacionalidad. Además, las mujeres extranjeras tienen más trabajos a tiempo parcial y suelen ser madres a una edad más temprana, lo que les impide externalizar el cuidado de sus hijos.

El informe también aborda la falsa creencia de que los solicitantes de protección internacional no pueden trabajar en España. A menudo, debido al desconocimiento o la falta de información, algunas empresas y departamentos de recursos humanos evitan contratar a estas personas, incluso después de superar el proceso de selección. El Foro destaca que dos directivas europeas y una sentencia del Tribunal Supremo contradicen esta creencia errónea, subrayando que los solicitantes de protección internacional tienen derecho a trabajar en España.

La última publicación del Foro para la Integración Social de los Inmigrantes desmiente varios mitos y proporciona datos verificables para combatir la desinformación sobre los inmigrantes en España, destacando la importancia de una información precisa y contextualizada.