Asaga advierte que las comunidades de pozo pueden dejar de extraer agua por el elevado precio de la electricidad
La Asociación de Agricultores y Ganaderos de Canarias (ASAGA Canarias ASAJA) alerta sobre el riesgo de que las comunidades de pozos de Tenerife paralicen la extracción de agua de riego y abasto ante el desmesurado incremento que ha experimentado la tarifa de la electricidad en los últimos meses y ante la incapacidad de sus propietarios de asumir estos elevados precios.
Para Ángela Delgado, presidenta de esta organización profesional agraria, “se trata de una situación de gran impacto no solo en la actividad agraria de la isla, sino en el propio suministro de la población, teniendo en cuenta que, según datos del plan hidrológico de los 150 hectómetros cúbicos que aportan las aguas subterráneas a la isla, 90 son de galerías y 60 provienen de pozos lo que supone un tercio del total de los recursos existentes en el subsuelo”, segun un comunicado remitido por esta organización.
Se da la circunstancia de que el pasado mes de octubre, las compañías eléctricas que suministraban energía a los pozos de la isla dejaron de hacerlo, al no poder hacer frente a sus compromisos con sus clientes, por lo que los comuneros se vieron obligados a someterse a las condiciones del mercado eléctrico para poder abastecerse y seguir extrayendo agua. El cambio de modelo supuso tener que pagar un precio cinco veces superior de lo pagaban, pasando de una tarifa fija mensual de 46 euros el megavatio a 239 euros el megavatio en el mes de diciembre.
Esta fuerte subida ha provocado un incremento de la factura de la luz tres veces superior a lo que pagaban las comunidades de pozos. Así, por ejemplo, instalaciones que abonaban 27.000€ de factura en el mes de octubre pagan ahora 82.000€, es decir, 55.000€ de diferencia en solo dos meses. La consecuencia más inmediata se ha visto reflejada en el coste de la pipa de agua que se ha incrementado de 0,30 a 0,60 euros, en función de la cota de elevación que se realice, y que deben asumir los agricultores para poder mantener con vida sus explotaciones, aunque muchos de ellos no podrán soportar esta subida. Estos importes podrían ser incluso mayores si el precio de la energía en los mercados mayoristas continua al alza. Esta misma semana, sin ir más lejos, se han alcanzado picos de 270€/MW y es previsible que el mes de enero cierre en niveles superiores a los ya de por sí “inasumibles costes” de diciembre.
Para poder paliar los efectos negativos de esta situación, ASAGA Canarias pide al Cabildo Insular de Tenerife, que ya ha garantizado a los agricultores que no pagarán más por el agua de riego de Balten al asumir la corporación la subida de los costes eléctricos, la creación de una línea de ayudas específica, dentro del presupuesto destinado a Agricultura, destinada a la extracción de agua de pozos que permita moderar y hacer más asumible al sector estos elevados costes, reduciendo así la repercusión económica que tendrá tanto en los agricultores como en los consumidores finales. Cabe recordar que la energía representa el 90% de los costes de operación de un pozo.
Aunque Canarias cuenta con una compensación de ocho millones de euros que gestiona la Consejería regional de Agricultura, Ganadería y Pesca, consignada anualmente en los PGE, destinada a abaratar a los agricultores el sobrecoste de la desalación y de la extracción de agua de pozos y de galerías para el riego agrícola en Canarias, las comunidades de pozos manifiestan que esta cuantía “de la que se desconoce si tendrá continuidad este año, fue asignada en un contexto totalmente diferente al actual, además de ser muy inferior al sobrecoste que han tenido que asumir desde que el precio de la luz se ha disparado”.
En este punto, ASAGA Canarias hace un llamamiento a las comunidades de pozos para que tramiten esta ayuda regional de ocho millones de euros, cuando salga publicada la convocatoria, y puedan así beneficiarse de estos fondos que permitiría deducir una parte de estos sobrecostes a los agricultores por el uso de agua de riego procedente de este tipo de infraestructuras.
En Tenerife hay actualmente 300 pozos, de los cuales alrededor de 150 permanecen activos repartidos por diferentes ubicaciones, situados entre la cota 200 y 400 sobre el nivel del mar, que suministran agua tanto a los agricultores como a distintos núcleos poblacionales.