Un total de 820 personas solicitaron asilo en Canarias en 2017
Un total de 820 personas solicitaron asilo en Canarias en 2017, según recoge el informe anula de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) presentado esta mañana en Gran Canaria. En el conjunto del Estado las peticiones ascendieron a 31.120, de las que se rechazaron el 65%, lo que representa diez punto por debajo de la media europea y supone que 2 de cada tres solicitudes reciben respuestas negativas.
En lo que va de 2018, las solicitudes de asilo en España alcanzaban las 17.000, con lo que CEAR cree posible superar el récord de peticiones de 2017. En la actualidad, España acumula más de 43.000 peticiones de asilo sin resolver, con un tiempo medio de espera estimado superior al año. todo esto ha provocado "graves problemas en el normal funcionamiento del sistema", indica la nota.
La institución pide al nuevo Gobierno “valentía” para tomar las medidas necesarias con el fin de afrontar con urgencia los retos del asilo en nuestro país y que "lidere una nueva política española y europea que no dé la espalda a las personas refugiadas".
Añade que, tras los primeros pasos del Gobierno en relación a la embarcación ‘Aquarius’ y las declaraciones sobre la posible retirada de las concertinas, la entidad instó al Ejecutivo asegurar el respeto de los derechos humanos en nuestras fronteras con medidas como la eliminación de las ‘devoluciones en caliente’, la puesta en marcha de vías seguras, adoptar un protocolo unificado ante las llegadas marítimas y hacer lo necesario para mejorar el sistema de asilo.
Según CEAR, el de 2017 pasará a la historia no solo como el año que la Unión Europea “falló clamorosamente” a los refugiados con el incumplimiento de los acuerdos de acogida y recibiendo apenas un tercio de las personas comprometidas a través de los programas de reubicación y reasentamiento. Además, se ha utilizado la criminalización de las organizaciones de rescate en el Mediterráneo como cortina de humo para invisibilizar las consecuencias de las políticas de blindaje de fronteras de la UE.
“En un año en el que más de 3.100 personas perdían la vida tratando de llegar a Europa, la preocupación de muchos estados de la UE pareció centrarse en poner trabas a la labor de las ONG y mantener lo más lejos posible, aunque sea en condiciones de esclavitud, a quienes trataban de poner a salvo sus vidas”, lamentó Lorenzo. Además, hechos como el sucedido recientemente con la embarcación ‘Aquarius’ confirman, según CEAR, esta política reducida a “cuanto más lejos, mejor”, algo que iría “en contra de todo lo que el proyecto europeo dice representar”.
Para evitar que situaciones como esta vuelvan a producirse, CEAR señala la necesidad de un mecanismo de coordinación regional con corresponsabilidad de todos los Estados miembro para organizar los rescates, desembarcos y posterior reubicación. “Es el momento de dar un paso hacia un verdadero Sistema Europeo Común de Asilo”, destacó Lorenzo, algo que para la entidad “por desgracia, está cada vez más lejos”.