El Cabildo de Tenerife ha registrado un total de 262 denuncias en el Parque Nacional del Teide en 2024, casi el triple que el año anterior, impuestas por los agentes de Medio Ambiente, la Guardia Civil y la Policía Canaria, mientras que en lo que va de año suman 98.
Así lo ha revelado en una rueda de prensa para dar cuenta de los acuerdos del Consejo de Gobierno el vicepresidente segundo, José Miguel Ruano, quien ha señalado que las infracciones más comunes son acampadas ilegales, acceso a zonas restringidas, circulación de vehículos por zonas no autorizadas, estacionamientos en sitios no autorizados o daños a la flora y las piedras.
Ha comentado que desde la corporación se hace un «especial control» de la actividad en el parque que se espera intensificar una vez se obtengan de forma definitiva las competencias de manos del Gobierno de Canarias.
«Ahora tenemos la competencia delegada, pero con esa competencia intentamos ejercer con la mayor intensidad posible el respeto a esa joya natural que para nosotros representa el Parque Nacional del Teide», ha indicado.
Las cuantías de las multas varían en función del tipo de infracción cometida.
Así, la multa por hacer fuego en un espacio natural protegido con grave riesgo a su integridad alcanza los 6.000 euros, mientras que circular, parar o estacionar un vehículo (con o sin motor) fuera de pista, en espacio natural protegido en senda o vereda (por peligro potencial para viandantes) oscila entre los 1.500 y los 6.000 euros.
Asimismo, la sanción por organizar una actividad con ánimo de lucro sin autorización es de 600 euros, mientras que acampar en una zona de exclusión o uso restringido está multado con 400 euros.
Por su parte, realizar una quema de residuos agrícolas sin autorización puede acarrear una multa de 700 a 1.000 euros (en función de época de riesgo, cercanía a masa boscosa, vigilancia de la quema), mientras que cazar en época de veda conlleva una multa de 1.000 euros.
Ruano ha comentado también que esta Semana Santa se ha desplegado un operativo especial junto a la Guardia Civil, la Policía Canaria y las policías locales para regular los accesos a los espacios naturales, poniendo el foco especialmente en el Parque Nacional del Teide, Anaga –sobre todo en Cruz del Carmen y las playas– y Teno, sobre todo en el caserío de Masca.
En Anaga, incluso lleva en vigor desde la semana pasada una línea de guaguas gratuita para acudir a las playas, la 948, que une el núcleo de Azanos con la playa de Almáciga y Benijos.
El vicepresidente segundo ha reconocido que esto «no significa» que las soluciones para resolver la movilidad en estos parajes estén «todas en marcha» ya que faltan algunas obras de acceso, construir aparcamientos disuasorios y desarrollar aún más las ecotasas.
Aún así sí cree que estas medidas de control inicial «son necesarias e imprescindibles para garantizar que se cumplan los objetivos ambientales de esos espacios tan singulares».
