En la madrugada de este lunes, una turista fue detenida en el Aeropuerto César Manrique tras agredir a varios agentes de la Guardia Civil. La pasajera, que se encontraba en un vuelo de British Airways con destino a Londres, generó disturbios a bordo del avión, lo que llevó al comandante a solicitar la intervención policial.
Los hechos ocurrieron a las 21:43 horas, durante el embarque del vuelo. Según el atestado policial al que ha tenido acceso La Voz, el comandante pidió la presencia de la Guardia Civil para desalojar a «unos pasajeros conflictivos» que se encontraban «en estado de embriaguez» y mostraban «una actitud desafiante y agresiva».
Al llegar al lugar, los agentes identificaron a las dos pasajeras problemáticas y les solicitaron que abandonaran el avión. Una de ellas se negó rotundamente, alegando que había pagado por su vuelo y que no iba a abandonar la aeronave voluntariamente.
Ante la negativa de las pasajeras, la tripulación tomó la decisión de desembarcar a los pasajeros de las diez primeras filas del avión, ya que las pasajeras conflictivas se encontraban en la novena fila. Una de las pasajeras finalmente accedió a salir de la aeronave «entre empujones y protestas» a los agentes.
La otra pasajera, que inicialmente se negó a mostrar su pasaporte, aprovechó la confusión para agarrar del brazo a uno de los agentes y morderle en el antebrazo derecho. El atestado policial detalla que en ese momento comenzó un forcejeo en el que la turista propinó «diversas dentelladas, arañazos, patadas y empujones» a los agentes.
La pasajera sigue detenida y se espera que pase este martes a disposición de la autoridad judicial. El sindicato Asociación Unificada de los Guardias Civiles (AUGC) ha manifestado que «defenderá los intereses de los agentes» implicados en este incidente.
