Policías nacionales de patrulla.

Desmantelan un punto de venta de ‘crack’ en el barrio de Cruz de Piedra de Las Palmas de Gran Canaria

La operación se ha saldado con cuatro detenidos, entre ellos un mejor de 17 años
10/04/2025

La Policía Nacional ha desarticulado una organización criminal dedicada a la venta de drogas en el barrio de Cruz de Piedra, en Las Palmas de Gran Canaria, con la detención de cuatro personas, entre ellas un menor de 17 años.

Una detención policial por tráfico de drogas

Tras una investigación de dos meses, los agentes intervinieron más de 75 gramos de ‘crack’, cocaína, hachís y una pistola de aire comprimido, así como una considerable cantidad de dinero en efectivo. La red, que operaba con estrictas medidas de seguridad para evitar la acción policial, se dedicaba principalmente a la distribución de ‘crack’ en la vía pública.

La operación policial, que tuvo lugar el pasado 2 de abril, fue llevada a cabo por la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (U.D.Y.C.O.) de la Brigada Provincial de Policía Judicial, en colaboración con el Grupo Operativo Especial de Seguridad (GOES) y la Unidad de Intervención Policial (UIP). En el marco de esta operación, se efectuaron cuatro registros domiciliarios en los que se hallaron sustancia estupefaciente suficiente para preparar más de 1.500 dosis listas para su distribución.

Durante los registros, la policía incautó 75 gramos de ‘crack’, 5,3 gramos de cocaína, 276 gramos de hachís, y 7,7 gramos de polen de hachís. Además, se decomisaron 2.830 euros fraccionados, básculas de precisión, y productos de corte utilizados en la preparación de las sustancias para su distribución. La intervención también permitió la incautación de una pistola de aire comprimido, utilizada presumiblemente para intimidar a los consumidores y mantener el control de las operaciones en el barrio.

Los agentes descubrieron que la organización utilizaba un punto de venta ubicado en la vía pública, en la zona de Cruz de Piedra, para distribuir las sustancias. Las ventas se realizaban de manera clandestina, con elevadas medidas de seguridad que dificultaban la intervención policial. La droga se ocultaba en bolsas dentro del portal de uno de los edificios donde residían los detenidos, dificultando así su vinculación directa con los vendedores.

El constante trasiego de consumidores en la zona había generado una «grave degradación» del entorno, afectando especialmente a las zonas cercanas a centros escolares y aumentando la sensación de inseguridad en el área. Las investigaciones revelaron que la red operaba de manera estructurada, controlando el flujo de ventas y el movimiento de consumidores.

Tras las detenciones, los cuatro implicados han sido puestos a disposición judicial. El menor de 17 años, quien también formaba parte de la red, ha sido entregado a la Fiscalía de Menores. A los detenidos se les imputan delitos de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal.