Hoy es Mar, 18 Feb 25
Los abusos
Los abusos

Condenado a 13 años y medio de cárcel por agredir sexualmente a la hija de su mujer desde que tenía 10 años

Los abusos, que se prolongaron tres años, ocurrían cuando la madre se ausentaba de la vivienda familiar en Arrecife
04/01/2022

La Sección Primera de la Audiencia Provincial ha condenado a 13 años, seis meses y un día de prisión a un hombre acusado de haber agredido sexualmente durante al menos tres años a la hija de su pareja y que comenzaron cuando la menor la niña tenía diez años.

Además de la condena penal, se le impone alejamiento durante 22 años e inhabilitación para profesión u oficio relacionada con menores durante 20 años, y 100.000 euros de indemnización para la víctima.

El acusado convivía en Arrecife con las dos hijas de la que era entonces su pareja sentimental, con la que además tiene una hija en común, y “como consecuencia de esa convivencia el trato con ellas era continuado y frecuente, lo que lo que dio lugar a que se generase una relación de ascendencia, confianza y autoridad” de la que el acusado hizo uso “para acercarse a la menor de más edad y mantener con ella un contacto más estrecho e íntimo”, según recoge la sentencia.

El padrastro aprovechaba las ausencias de la madre de las niñas para iniciar una serie de encuentros privados.  “Cuando estaba camino de los once años de edad comenzaron los contactos de carácter sexual, primero fueron tocamientos en las piernas y en la zona genital por encima de la ropa, para luego derivar sin solución de continuidad en la introducción del pene por la vía vaginal y anal, penetraciones que efectuaba sin hacer uso de preservativos y que se repitieron varias veces, proyectándose durante más de dos años, hasta que la menor afectada, próxima a cumplir los 13 años, se lo cuenta a su madre por no poder soportar más la presión continúa y comenzar a comprender lo que estaba pasando”. Al día siguiente de que esto ocurriera, la madre de las niñas presentó la denuncia.

La sentencia recoge que el acusado amenazaba a la niña con “rajarle la cabeza” si se lo contaba a su madre y también le advertía que él iría a la cárcel, pero a ella la mandarían a un internado.