La pandemia destapa los problemas emocionales del personal sanitario, según un estudio de la ULL
Investigadoras del Laboratorio de Cognición Social de la Universidad de La Laguna, han publicado un estudio en la revista científica Human Resources for Health en el que indagan el papel fundamental que juega la empatía y los estados mentales en el contexto médico. El objetivo principal de esta investigación es conseguir desarrollar estrategias que ayuden tanto a los profesionales como a la sociedad a manejar los efectos emocionales del personal de este ámbito.
La pandemia ha impulsado la necesidad de abordar el bienestar emocional y los problemas relacionados con el estrés de la profesión. Elementos como el síndrome del quemado, el sufrimiento moral o la pérdida de confianza en el trabajo son algunas de las razones que hacen que sean cada vez más los sanitarios que quieren abandonar su profesión, teniendo en cuenta el impacto social y personal que esto conlleva.
Durante los meses del Covid-19, la sociedad caracterizaba a los sanitarios como superhéroes algo que, según el estudio “acarrea consecuencias negativas ya que implica deshumanización. Esto reduce la percepción de los profesionales como seres humanos capaces de experimentar malestar y dolor”. Cuando se parte de una imagen ligada a la heroicidad, la propia vulnerabilidad es la que hace que se transforme, negativamente, la imagen que tiene cada persona sobre sí misma.
Por lo tanto, es muy importante permitir que las personas o grupos que experimentan sufrimiento o agotamiento expresen sus propias necesidades y se les brinde apoyo. ”Compartir emociones requiere un trabajo cognitivo relacionado con los significados de esta profesión que ayuda a recuperar un sentido grupal y la identidad profesional”, explican las investigadoras de la Universidad de La Laguna.